Las autoridades de Inmigración podrían valerse de dispositivos electrónicos que ubicados estratégicamente en la frontera sean capaces de detectar el movimiento de indocumentados.
Los sensores creados por la empresa Williamsrd de Fort Worth, Texas, facilitarían la intervención de los patrulleros fronterizos con inmigrantes que buscan cruzar ilegalmente a Estados Unidos.
De acuerdo con un reporte de Telemundo 47, el equipo distinguiría perfectamente entre un animal y un ser humano.
Colocar los dispositivos –a un costo de aproximadamente, $1,000 dólares por unidad– implicaría una inversión de $190 millones de dólares.
Los sensores funcionarían con energía solar y contarían con un sistema de posicionamiento global (GPS) para enviar los datos de la ubicación a una computadora; estos datos, a su vez, serían dirigidos a los agentes.
El equipo se colocaría a lo largo de la frontera cada 100 metros.
”Un muro de 21 billones de dólares es ridículo, no tiene sentido que los contribuyentes tengan que pagar esto”, señaló Della Williams, presidenta de la compañía.