Con una ruidosa protesta que interrumpió brevemente la sesión y provocó que los legisladores texanos en el pleno se enfrentaran –con amenazas de usar armas- quedó evidente que existe una gran división en torno a las políticas migratorias adoptadas a nivel estatal.
Los manifestantes se habían organizado y vestidos con camisetas rojas en las que se leía “Lucha”, ocuparon varios lugares de la galería en tanto avanzaba la sesión legislativa.
Luego, empezaron los aplausos interrumpiendo a los legisladores que llevaban el uso de la palabra, los que fueron seguidos por silbatos y gritos de “¡Aquí para quedarnos!” y “Hey, hey, ho, ho, la SB4 debe irse”, refiriéndose a la ley promulgada por el gobernador Greg Abbott hace pocos días.
También se mostraron pancartas con la leyenda: “¡Nos vemos en la corte!” y “Nos vemos en las urnas”.
Entonces se detuvo la sesión y se solicitó la presencia de oficiales del orden para desalojar la galería. La protesta continuó durante unos 20 minutos mientras los agentes escoltaban pacíficamente a los manifestantes en pequeños grupos. No se reportaron arrestos.
Bajo la SB4, se requiere que los jefes de policía de Texas -bajo amenaza de cárcel y destitución- cumplan las solicitudes federales para retener a criminales sospechosos para una posible deportación. Los agentes también cuentan con la opción de preguntar sobre el estatus migratorio a todo aquel que detengan.
El representante Ramón Romero, demócrata de Fort Worth, dijo que estaba de pie junto al representante demócrata Cesar Blanco, de El Paso, cuando su colega republicano Matt Rinaldi, de Irving, se les acercó y comenzaron los intercambios de gritos con Blanco. Otros legisladores tuvieron que intervenir para que el enfrentamiento no creciera.
Posteriormente, un grupo de legisladores demócratas realizó una conferencia de prensa para acusar a Rinaldi de amenazar con ponerle una bala en la cabeza a alguien en el pleno de la Cámara baja, durante otro altercado.
Afirmaron que el comentario fue realizado hacia el representante demócrata Poncho Nevarez, de la localidad fronteriza de Eagle Pass.
Rinaldi salió de la Cámara baja y no comentó, pero dijo al Dallas Morning News que simplemente objetó ante los demócratas que parecían alentar a los manifestantes.
Congresistas demócratas de Texas denunciaron al cierre de las sesiones, que un legislador republicano de ese estado llamó a Inmigración para disolver una protesta frente al Capitolio contra la ley estatal que prohíbe las “ciudades santuario”.
Según la bancada demócrata, liderada por los representantes estatales Rafael Anchía, Armando Walle y César Blanco, el representante republicano Matt Rinaldi dijo que estaba “contento” porque acababa de llamar a la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) para que desalojara y deportara “a esta gente”.