Tras darse a conocer que la Quinta Corte Federal de Apelaciones dictaminó el martes 13 de marzo que la mayoría del contenido en la ley SB 4 de Texas, considerada anti-inmigrante, puede permanecer vigente mientras continúa la batalla legal sobre su constitucionalidad, las reacciones no se hicieron esperar y aunque el procurador estatal se declara satisfecho, algunos legisladores opinan lo contrario.