La Unión Estadounidense para las Libertades Civiles (ACLU) anunció el martes 23 que ha tomado medidas legales a fin de restaurar las protecciones del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) a favor de la migrante mexicana Jessica Colotl.
En un comunicado, la ACLU indicó que junto con sus socios del estado de Georgia y un despacho de abogados local trabaja para lograr que el gobierno federal respete el derecho de Colotl de permanecer en Estados Unidos como beneficiaria del DACA.
La acción se produce luego de que autoridades del gobierno del presidente Donald Trump de manera repentina y arbitraria revocaran el estatus legal de Colotl como beneficiaria del DACA, lo que le permitía trabajar en este país. La mexicana había sido beneficiada por el DACA en dos ocasiones anteriores.
“Jessica es exactamente el tipo de ‘chica absolutamente increíble’ que el presidente Trump ha dicho que no debe ser objetivo de las autoridades de inmigración”, expresó Katrina Eiland, abogada de la ACLU.
Eliand añadió que al extender su permiso de trabajo en dos ocasiones, el Departamento de Seguridad Interna (DHS) reconoció también que Colotl no representa ningún riesgo para Estados Unidos.
“Ella sigue siendo la misma persona ejemplar que considera a Estados Unidos su hogar desde hace casi 20 años. El gobierno ha violado la ley al alterar su posición por completo en un caso en el que nada ha cambiado”, explicó Eiland.
LA ACLU precisó que este martes presentó una acción legal que pide al DHS que reinstale el estatus protegido de Colotl bajo el DACA y que revalúe su solicitud de renovación, bajo los mismos estándares que empleó para otorgarle las aprobaciones anteriores.
La organización pro inmigrante recordó que el gobierno de Estados Unidos ha basado su caso contra Colotl en un cargo antiguo que ya había rechazado, según el cual, la estudiante mexicana realizó en 2010 una declaración falsa a la policía, tras ser detenida por conducir un auto sin licencia.
Colotl, sin embargo, nunca hizo una declaración falsa a la policía, ni tampoco se declaró culpable de ningún cargo del que se le acusó, de acuerdo con la ACLU. Las autoridades estadunidenses retiraron los cargos contra la mexicana en 2013.
La mexicana, de 28 años de edad y quien reside en el estado de Georgia, ha vivido en Estados Unidos desde que tenía 11 años. Tras graduarse con honores de la secundaria, Colotl asistió a la Universidad estatal Kennesaw, donde también sobresalió académicamente.
Además de participar en varios organismos de la comunidad mexicana, Colotl ha trabajado como asistente legal y aspira a asistir a la escuela de derecho para convertirse en una abogada de inmigración.
Su caso ha estado desde 2010 en el centro del debate sobre la migración indocumentada en Estados Unidos, y ha sido comentado de nuevo, luego que el DHS anunció este mes que Colotl era considerada una prioridad para ser deportada.