SAN DIEGO, CAL.- El estado de California accedió el miércoles 11 de abril a desplegar 400 efectivos de la guardia nacional a la frontera con México pero aclaró que no detendrán a personas que tratan de llegar a Estados Unidos para huir de la violencia en sus países ni son tropas que participarán en la construcción de ningún muro fronterizo.
Con el compromiso de California, los estados fronterizos en conjunto enviarán a poco más de dos mil efectivos a la región.
El gobernador Jerry Brown informó al presidente Donald Trump que, en respuesta a su solicitud de desplegar tropas estatales en la frontera, la Guardia Nacional de California trasladará a los límites con México a 400 efectivos, adicionales a 250 que ya colaboran en tareas contra el tráfico de drogas.
“Seamos claros en el alcance de esta misión”, aclaró el gobernador Brown en carta al mandatario, “esta no será una misión para construir un nuevo muro, tampoco será una misión para capturar a mujeres y niños o para detener a personas que escapan de la violencia y buscan una vida mejor”. El mandatario reiteró que “la Guardia Nacional de California no aplicará las leyes federales de inmigración”.
La decisión de California contrasta con las razones por las que el presidente Trump ordenó enviar tropas a la frontera. El mandatario giró la orden al informarse que una caravana anual de centroamericanos, en su mayoría madres solteras con hijos de Honduras, se dirigía a Estados Unidos a solicitar asilo huyendo de la violencia en su país.
El gobernador Brown aclaró que “no hay una oleada masiva de inmigrantes que fluyan hacia California”. En general, añadió, “las detenciones de inmigrantes en la frontera fueron tan bajas el año pasado como lo han sido en casi 50 años, y el 85 por ciento de esas aprehensiones ocurrieron fuera de California”.
A manera personal, Brown dijo estar de acuerdo “con los obispos católicos, que han dicho que los funcionarios locales, estatales y federales deben ‘trabajar de manera colaborativa y prudente en la implementación de este despliegue, asegurando que la presencia de la Guardia Nacional se mida y no interrumpa la vida de la comunidad’”.
California ya tenía desplegados por ahora a 55 soldados de la guardia nacional en la frontera en apoyo en tareas contra el narcotráfico y otros 195 en todo el estado en la misma misión. Un total de 250.
Con los 400 asignados el miércoles 11 de abril serán en total 650 militares estatales en respuesta a la petición de Trump, que será financiada con fondos federales.
Esos fondos “permitirán a la Guardia apoyar operaciones dirigidas contra bandas criminales transnacionales, traficantes de personas y contrabandistas ilegales de armas de fuego y drogas a lo largo de la frontera, de la costa y en todo el estado”, dijo Brown.
El gobernador abundó en las razones por las que su gobierno accedió a enviar a los guardias nacionales a la frontera.
“La lucha contra estas amenazas criminales son prioridades para todos los estadounidenses, republicanos y demócratas. Es por eso que el estado y la Guardia han apoyado por mucho tiempo este importante trabajo y acordaron una asistencia focalizada similar en 2006 bajo el presidente George Bush y en 2010 bajo el presidente Barack Obama”.
El gobernador de California no especificó la fecha en que movilizará los 400 militares en respuesta a la petición del presidente Trump.