LAS VEGAS, NEVADA.- En medio de enfrentamientos políticos y amenazas del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cerca de 800.000 dreamers permanecen sin una solución definitiva a su estatus migratorio cuatro meses después del anuncio de la Casa Blanca de eliminar el programa DACA a la espera de una propuesta legislativa.
El 5 de septiembre de 2017 empezó el calvario para los jóvenes “soñadores” tras el anuncio del presidente Trump que le daba un plazo tajante de seis meses a los legisladores en Washington DC para que le presenten una propuesta de ley “que beneficie al país y legalice a los dreamers”.
Desde entonces, los demócratas han intentado ponerse de acuerdo con los republicanos que tienen la mayoría en ambas cámaras, para presentar el anhelado Proyecto, en medio de debates de otros temas prioritarios para el país y de los acostumbrados y polémicos tweets del mandatario.
El problema para los “soñadores” y sus familias es que, en medio de la espera, llegó el debate para aprobar el presupuesto federal al que los demócratas le incluyeron una solución para los jóvenes llegados en la infancia. !Y ahí fue Troya! El tema se politizó aún más.
Los ánimos se encendieron a tal punto que el presidente dijo que “Los demócratas están más preocupados por los ilegales que por nuestra seguridad”.
Las protestas se intensificaron y las partes endurecieron sus posturas. En medio de las discusiones, la zozobra para los dreamers aumentaba.
El gobierno fue cerrado a la medianoche del viernes 19 de enero y de nuevo se anunció otra amenaza desde la Casa Blanca: “El presidente no negociará sobre una reforma migratoria hasta que los demócratas dejen de hacer juegos y reabran el Gobierno”, dijo la portavoz Sarah Sanders.
Así fue como Trump ‘celebró’ su primer año de gobierno.
El lunes 22 de enero se llegó a otro acuerdo provisional para reabrir el gobierno hasta el 8 de febrero cuando la zozobra seguirá. Los dreamers han expresado, con razón, que se sienten ‘secuestrados’ por los políticos. Mientras se llega a una solución definitiva, sus proyectos de vida seguirán a la espera, en tanto que más de 100 dreamers pierden su DACA por día, según los cálculos de American Progress.
Es preciso recordar que los cierres administrativos del gobierno más significativos por falta de aprobación de su presupuesto federal se dieron en 1995, bajo la presidencia del demócrata Bill Clinton, por un total de 21 días; y en 2013, bajo la presidencia del también demócrata Barack Obama, por 16 días. En ambos casos, el bloqueo fue ejercido por la mayoría republicana en el congreso.