MIAMI, FL.- El congresista republicano por Florida Larry Metz presentó un proyecto de ley encaminado a combatir la inmigración indocumentada mediante la prohibición de las llamadas “ciudades santuario”.
Metz sometió el proyecto HB-9, diseñado para obligar a las jurisdicciones que se niegan a cooperar con las autoridades federales de inmigración a facilitarles la deportación de indocumentados.
La medida obligaría a los condados y ciudades a hacer cumplir las leyes federales de inmigración de programas voluntarios.
La iniciativa se alinea con la política migratoria del presidente Donald Trump, que ha amenazado con recorte de fondos federales a las ciudades que no colaboren plenamente con las autoridades migratorias.
El proyecto de Metz establece requisitos sobre las órdenes de detención prolongada emitidas por la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE).
Estas órdenes han sido consideradas “una violación de los derechos civiles de la personas”, según la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), por carecer de una orden judicial.
Por otro lado, la iniciativa “autoriza a las agencias policiales a transportar a extranjeros no autorizados”.
En los últimos años más de 300 jurisdicciones del país aprobaron leyes que impiden a la Policía participar en actividades de inmigración que son voluntarias.
En Florida, varios condados se sumaron a las “ciudades santuario” para fomentar la confianza entre los indocumentados y las autoridades policiales, entre otros motivos.
El condado de Miami-Dade, que tiene una población en la que el 60 % nació en el extranjero, fue uno de ellos, pero retrocedió a comienzos del año tras las amenazas de Trump.
La semana pasada el fiscal general de EE.UU., Jeff Sessions, urgió a las autoridades locales del país a seguir el ejemplo de Miami-Dade de “castigar y no proteger” a los criminales durante un discurso en Miami.