TUCSON (AZ).- Grupos defensores de derechos de inmigrantes presentaron hoy una demanda en contra de la Oficina de Inmigración y Aduanas (CBP) acusándola de rechazar frecuentemente a personas que buscan asilo político en Estados Unidos en los puertos de entrada en California, Arizona, y Texas.
La demanda, depositada hoy ante una corte federal en Los Ángeles, fue presentada por el Concilio Americano de Inmigración en conjunto con Al Otro Lado, una organización que otorga servicios legales a inmigrantes deportados y refugiados en Los Ángeles, California y Tijuana, Baja California (México).
Los demandantes representan a seis personas que experimentaron en carne propia lo que califican como una conducta ilegal por parte de los oficiales de CBP, informó el Concilio Americano de Inmigración en un comunicado de prensa.
Aseguró, por otra parte, que CBP utiliza amenazas, intimidación, abuso verbal, uso de fuerza física y coerción para negar la oportunidad a las personas de solicitar asilo político en este país a pesar del peligro que puedan correr a su regreso a sus países de origen.
Durante los últimos meses, se ha incrementado el número de casos de personas que aseguran haber sido rechazadas de los puertos de entrada cuando se presentaron a solicitar asilo político.
El caso podría tener amplias repercusiones porque si el juez otorga un estatus de demanda colectiva eso permitiría incluir a más demandantes.
Los activistas aseguran que al ser rechazadas en los puertos de entrada, las personas que piden refugio se ven obligadas a regresar a sus países de origen donde son vulnerables a crímenes como el secuestro, violación, tortura o inclusive la muerte.
Uno de los casos es de una mujer hondureña, identificada solamente como “D.D”, quien junto con su hija de 18 años han sido amenazadas y violadas por miembros de la pandilla MS-13.
Las dos mujeres lograron escapar y a pesar de haberse presentado en tres ocasiones ante el CBP en el puerto de entrada en Otay Mesa (California) buscando asilo político, los agentes siguen rechazándolas una y otra vez.
La mujer junto con su hija permanecen en un albergue en Tijuana, pero ya no pueden estar por más tiempo en México por lo que su única esperanza es que les permitan solicitar asilo político en Estados Unidos.