SAN DIEGO, CA.- La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos comenzó el martes un programa piloto donde sus agentes usarán cámaras corporales en nueve instalaciones con miras a usarlas en otras más, lo que la convertiría en la primera agencia federal de seguridad en emplear esa técnica a gran escala.
Después de un año de estudio, la agencia del orden más grande de Estados Unidos concluyó en noviembre de 2015 _durante la presidencia de Barack Obama_ que no podía usar extensamente las cámaras corporales debido al alto costo, problemas técnicos y la falta de aprobación sindical. Sin embargo, reconoció que la tecnología tenía potencial en circunstancias limitadas.
El análisis de la agencia también concluyó que las cámaras usadas en el campo no funcionaron bien en las escarpadas y remotas condiciones en las que trabajan muchos agentes de la Patrulla Fronteriza.
“A algunas les fue mejor que a otras”, dijo Austin Skero, director de la unidad de seguridad y cumplimiento de la agencia de aduanas, conocida por sus siglas en inglés CBP.
Funcionarios de la CBP dijeron que la tecnología ha evolucionado desde las pruebas de 2015 y las cámaras ahora están armadas conforme a lo aprendido en los ensayos anteriores, aunque la agencia declinó identificar a los fabricantes.
Los funcionarios dijeron que los posibles beneficios de las cámaras incluyen aportar evidencia en casos criminales, mejorar el entrenamiento y fortalecer el desempeño y la responsabilidad.
Se espera que los agentes enciendan y apaguen las cámaras durante incidentes donde tengan que usar la fuerza y encuentros “que puedan volverse ásperos, hostiles o violentos”, dijo Skero.
El Congreso aceptó financiar las pruebas autorizando 5 millones de dólares en el último año del gobierno de Obama.
Las pruebas bajo el gobierno pasado se realizaron en medio de un intenso debate nacional sobre si los agentes estaban usando fuerza excesiva. Los empleados de aduanas usaron las armas 55 veces en 2012, una cifra que bajó a 12 en 2017.
Las pruebas no usarán tecnología de reconocimiento facial y concluirán en octubre.
Se realizarán en zonas de cruces fronterizos de Eagle Pass y Detroit, ambas en Texas; en el Aeropuerto Internacional Hartfield-Jackson de Atlanta y en el puerto marítimo de Long Beach, California; una unidad de patrullaje aéreo en Tucson, Arizona; una unidad de patrullaje marítimo en West Palm Beach, Florida; y también las traerán agentes de la Patrulla Fronteriza en Campo, California; Kingsville, Texas, y Las Cruces, Nuevo México.