Ciudad de México, México.- Al menos 5.874 migrantes de nacionalidades diversas, principalmente centroamericanos, se movilizan en el suroriental estado mexicano de Chiapas o esperan en la frontera para poder ingresar al país, informó este martes el Gobierno de México.
La Secretaría de Gobernación (SEGOB) y el Instituto Nacional de Migración (INM) explicaron en un comunicado que tienen localizadas caravanas migrantes en el poblado de Mapastepec, en tránsito a Huixtla y en la estación migratoria de Tapachula.
En Tapachula, ciudad situada a 40 kilómetros de la frontera con Guatemala, “630 personas extracontinentales” están alojadas en la estación migratoria Siglo XXI; otras 412 esperan en el exterior para ingresar a hacer trámites migratorios, precisaron las autoridades.
En Mapastepec, a unos 100 kilómetros de Tapachula, Migración ha instalado un campamento en el que se atienden a 1.632 migrantes que se encuentran en proceso de regularizar su estadía en México, indicaron.
Destacaron las autoridades que una vez que a estos migrantes se les otorgue la tarjeta de visitante regional con permiso laboral ya podrán “emplearse en los estados del sureste mexicano”.
Otro grupo de 3.200 extranjeros se moviliza hacia la ciudad de Huixtla, situada entre Tapachula y Mapastepec, donde las autoridades mexicanas esperan darles atención para revisar y tomar una determinación sobre su permanencia en el país.
Gobernación y Migración apuntaron que en todos los casos de migrantes se “garantizarán las condiciones y esquemas necesarios para proteger sus derechos humanos, así como su estancia ordenada, regular y segura, en México”.
Al tiempo que estas caravanas avanzan en territorio mexicano, el Gobierno de México ha repatriado a 148 ciudadanos cubanos que tenían una estancia irregular en este país, conforme los procedimientos legales vigentes y en acuerdo con autoridades de Cuba.
Más de 2.000 cubanos que están en Tapachula, han afirmado que este miércoles iniciarán su viaje a Ciudad de México, y confían en que las autoridades mexicanas les permitan llegar hasta el norte del país para, finalmente, pedir asilo en Estados Unidos.
En los últimos días, las autoridades mexicanas han deportado vía aérea a migrantes africanos, haitianos y de otros países que estuvieron en la estación y no comprobaron su estancia regular en el país.