ALBUQUERQUE, NM.- La gobernadora de Nuevo México, Susana Martínez, respalda la decisión del gobierno federal de separar a los hijos de los padres que ingresan al país sin autorización, dijo la mandataria estatal en una visita a la frontera.
Martínez, que asistió a la inauguración de una fábrica en Santa Teresa el lunes, dijo que apoya la tolerancia cero del gobierno del presidente Donald Trump, informó el diario Albuquerque Journal.
La gobernadora republicana es una firme partidaria de la vigilancia estricta de la frontera.
No se debe permitir a la gente violar la ley “solo porque tienen hijos”, dijo Martínez.
“Como fiscal durante 25 años, si un padre salía a robar una tienda a mano armada y se llevaba dinero para comprar drogas, arrestábamos a ese individuo y ese individuo iba a la cárcel, y se tomaban disposiciones para el niño, las mejores disposiciones”, dijo Martínez.
Meses atrás, las autoridades federales aprobaron separar a los niños de sus padres como parte de un programa piloto en el sector El Paso de la Patrulla Fronteriza, que abarca todo Nuevo México.
El número de arrestos de personas que cruzan ilegalmente la frontera ha aumentado.
Mayo fue el tercer mes consecutivo en que agentes de la patrulla arrestaron a más de 50.000 personas que ingresaban sin autorización desde México. Muchos eran centroamericanos en busca de asilo.
Separar a los niños de sus padres puede causar “daños irreparables”, dijo en un comunicado la Academia Estadounidense de Pediatría.
Las familias pueden reunirse cuando los padres paguen la fianza a la espera del proceso inmigratorio, dijo Martínez.
Los inmigrantes que no tienen acceso a abogados que soliciten la libertad bajo fianza o que carezcan de los fondos para pagar la fianza pueden evitar que se les separe: para ello basta que no crucen la frontera ilegalmente, dijo Martínez.