DENVER, CO.- El mexicano Melecio Andazola Morales, residente en Colorado desde hace 20 años y con cuatro hijas estadounidenses, fue deportado el viernes pasado luego de fracasar las gestiones hechas por su familia antes las autoridades federales de inmigración, confirmó su hija Viviana Andazola Márquez.
La joven dijo al periódico de la Universidad Yale, donde estudia, que su padre fue sacado del centro de detención de indocumentados el 15 de diciembre y deportado a México.
Se le prohibió regresar a Estados Unidos durante 20 años.
El caso recibió atención nacional porque Andazola Morales fue arrestado el pasado 12 de octubre cuando se presentó junto con Viviana, su abogado y un traductor en el Edificio Federal del centro de Denver para lo que pensaban que sería la última entrevista con agentes de inmigración antes de obtener la residencia permanente.
Andazola Márquez había iniciado los trámites para regularizar la situación legal de su padre y ambos accedieron a ir a la cita de inmigración luego de que se les informase que el caso había sido “recomendado para aprobación”.
Tras el arresto, por medio de un vídeo, Andazola Márquez indicó que su padre llegó a Estados Unidos en 1998, se radicó en la zona de Denver, trabajó en la construcción desde entonces y tiene cuatro hijas estadounidenses.
Es “el sostén económico de la familia”, sin el cual “no tendremos manera de tener estabilidad financiera”, señaló Viviana en aquel vídeo.
Andazola Márquez anticipó que, a pocos meses de graduarse de la Universidad Yale, se vería obligada a dejar esos estudios para hacerse cargo de sus hermanos, si su padre era enviado a México.
La deportación al parecer se basa en una “orden de exclusión” que se le impuso a Andazola Morales cuando, en su adolescencia, trató de ingresar legalmente a Estados Unidos, pero se le negó la entrada.
Aunque las leyes que se aplicaban en aquel momento ya no están vigentes, el no haber respetado aquella orden, algo aparentemente descubierto en el momento de la entrevista en octubre pasado, llevó al arresto del mexicano, a quien no se le concedió ni libertad condicional ni libertad monitoreada.
Según la información difundida por Andazola Márquez, su padre está ahora en Nogales, México.
La ausencia de su padre, dijo, no solamente dividió a la familia, sino que la “devastó económicamente” y podría obligar a parte de sus integrantes a mudarse a México para estar con Andazola Morales.
La estudiante lamentó que ni durante el arresto de Andazola Morales ni durante las gestiones para liberarlo, las autoridades de inmigración hubiesen notificado al abogado de la familia sobre la situación de su padre, ni siquiera cuando se le negó la cancelación de la deportación.