Washington, DC.- El número de cruces irregulares en la frontera con México se duplicó en febrero respecto al mismo mes de 2018 y registró un récord en los últimos 12 años, según datos publicados por la Patrulla Fronteriza.
En total, 76.103 migrantes fueron detenidos en el linde sur del país, en comparación con los 36.751 del mismo mes del año pasado, de acuerdo a la CBP.
Respecto a enero, mes en el que se arrestó a 58.207 migrantes, la cifra aumentó un 31 %. “El sistema está mucho más allá de su capacidad y se encuentra en un punto crítico”, dijo el comisionado de la Patrulla Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), Kevin McAleenan, en una rueda de prensa en Washington al presentar el informe.
Este dato mensual es el mayor registrado en cualquier febrero de los últimos 12 años.
“Basado en la experiencia de los hombres y mujeres agentes en primera línea, esto es claramente una crisis fronteriza y humanitaria”, consideró McAleenan.
El alto funcionario de la CBP apuntó que la situación actual “no es segura” para los inmigrantes y señaló que para los agentes fronterizos “es un desafío proporcionar atención humanitaria”.
“Independientemente de la política preferida de cualquiera, el status quo es inaceptable. Presenta una crisis urgente y creciente”, insistió McAleenan.
Sin embargo, el dato registrado en febrero de este año está muy lejos de las 1,6 millones de personas que fueron arrestadas en el año 2000 en la frontera, bajo el mandato del expresidente Bill Clinton (1993-2001).
El comisionado de la CBP argumentó que los próximos meses -marzo, abril y mayo- registran habitualmente picos de llegadas de indocumentados a la frontera, gracias a las buenas temperaturas que hacen que la travesía sea más cómoda.
“Estamos muy preocupados de que los números (de detenciones) van a continuar creciendo”, agregó.
Entre los migrantes que cruzaron, 40.325 pertenecían a familias y 7.249 fueron menores no acompañados.
De acuerdo al informe, más del 90 % de los migrantes de febrero procedían de Guatemala, según McAleenan, que explicó que “muchas familias guatemaltecas ahora están utilizando autobuses y llegando a la frontera suroeste en tan solo cuatro y siete días de manera muy consistente”.
Asimismo, Honduras desbancó a México como el segundo país con más nacionales que llegaron ilegalmente al país.