La decisión del presidente Donald Trump de terminar paulatinamente el Estatus de Protección Temporal (TPS) que beneficiaba a cerca de 300 mil personas, continúa afectando la vida de miles de familias, la mayoría de las cuales ha vivido en Estados Unidos durante 20 años con el objetivo de lograr una mejor calidad de vida, la cual les fue prácticamente imposible obtener en sus países de origen.

Tres cuartas partes de ciudadanos norteamericanos que respondieron a una reciente encuesta de la Universidad de Quinnipiac coincidieron que a los “Dreamers” se les debería permitir permanecer en los Estados Unidos, por lo que organizaciones pro inmigrantes y soñadores exigen al Congreso cumpla con la voluntad de la comunidad.

Los funcionarios, que no detallaron si llegaron a algún acuerdo concreto, se reunieron en la Casa Presidencial, con el objetivo de buscar “puntos en común para solucionar el problema al que están sometidos los 190.000 beneficiarios salvadoreños del TPS”, que vencen en septiembre de 2019