WASHINGTON, DC.- El presidente Donald Trump todavía tiene que acordar con el Congreso la rebaja de 45.000 a 30.000 admisiones del cupo de refugiados para el próximo año fiscal anunciada este lunes 17 por el secretario de Estado, Mike Pompeo.
Así lo admitió la portavoz de Pompeo, Heather Nauert, quien añadió que la cifra anunciada por el secretario de Estado “puede que no sea la final”.
“Esta es solo una propuesta que el Gobierno trasladó al Congreso. El Gobierno deberá consultar ahora al Congreso. Tras esas consultas, el presidente tomará una decisión”, explicó Nauert.
Algunos senadores demócratas ya han adelantado que presionarán al Ejecutivo para que aumente el cupo.
Pompeo anunció este lunes la reducción de un tercio -de 45.000 a 30.000- del cupo para los refugiados para el próximo año fiscal 2019.
Se trataría de la segunda drástica rebaja de asignaciones de Trump, que al asumir el poder redujo a los actuales 45.000 las 110.000 que el expresidente Barack Obama autorizó al final de su mandato.
Durante la campaña electoral de 2016, Trump criticó la política de Obama hacia los refugiados y consideró que algunos podían ser en realidad terroristas.
También prohibió temporalmente la entrada en el país de la gran mayoría de los refugiados del mundo durante 120 días, dentro de su polémico veto migratorio.