SAN DIEGO, CA.- El secretario de Justicia Jeff Sessions ordenó el viernes una política de “tolerancia cero” contra los inmigrantes que entren ilegalmente a Estados Unidos a través de la frontera con México.
La orden indica que los fiscales federales de los estados fronterizos deben de poner más énfasis en presentar cargos de ingreso ilegal contra inmigrantes, algo que históricamente ha sido tratado como un delito menor cuando se aplica a inmigrantes que no habían sido detenidos por las autoridades fronterizas anteriormente o que han sido detenidos solo pocas veces.
A los contrabandistas de inmigrantes que han sido detenidos varias veces generalmente son encausados por delitos más graves.
Sessions dijo a los fiscales que le pidan más recursos si los necesitan. Como modelo, señaló a un proyecto de la Patrulla Fronteriza lanzando en el 2005 que generalmente culmina en condenas y sentencias carcelarias de poco tiempo.
La semana pasada, Sessions estableció que los jueces de inmigración tienen que procesar una cantidad mínima de casos a fin de mitigar el atraso en las cortes.
La decisión del titular del Departamento de Justicia se produjo un día después de la difusión de los nuevos datos de arrestos en la frontera sur el mes pasado, y que demostraron un aumento del 203% respecto a marzo de 2017.
Las cifras también reflejaron un aumento del 37% respecto a febrero pasado, en lo que supone el mayor incremento de un mes a otro desde 2011.
Haciéndose eco de las quejas del presidente Donald Trump, Sessions afirmó que la situación en la frontera sur es “inaceptable”, y condenó que el Congreso no ha podido aprobar una ley que cierre las “lagunas peligrosas” y financia en su totalidad el prometido muro fronterizo.