WASHINGTON .- Uno de los principales aliados demócratas en el Senado rehusó el miércoles garantizar a un grupo de inmigrantes traídos a Estados Unidos sin autorización cuando eran niños que el Congreso les concederá antes de las vacaciones navideñas una protección permanente de la deportación.
“Desearía poder decirles que estoy totalmente confiado de que lo vamos a lograr pero no lo puedo decir porque no quiero crear falsas expectativas”, dijo el senador por Illinois Dick Durbin ante inmigrantes y activistas reunidos en una carpa levantada en el National Mall para planear actividades y protestas la semana próxima.
La minoría demócrata y una treintena de republicanos en la cámara baja han presionado reiteradamente por una solución legislativa este año, argumentando que esos jóvenes inmigrantes enfrentan un futuro incierto.
Sin embargo, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, ha dicho que no ve la necesidad de abordar ninguna legislación antes de marzo para proteger a estos 800.000 inmigrantes conocidos como “dreamers”.
El presidente Donald Trump suspendió las protecciones temporales de deportación otorgadas por el gobierno de Barack Obama en 2012 bajo un programa conocido como DACA y dio al Congreso hasta marzo para hallar una solución permanente.
Durbin se mostró en contra de condicionar a exigir una solución para los “dreamers” a cambio de apoyar un proyecto presupuestario que evite una parálisis en las operaciones del gobierno federal el 22 de diciembre, tal como prefieren algunos miembros de su bancada.
“No queremos irnos a casa para las festividades sin lograr esto pero no queremos paralizar el gobierno”, indicó. “No creemos que deba ser una opción”.
Durbin relató que durante las negociaciones en curso sus colegas republicanos presentan una “lista muy larga” de solicitudes en seguridad fronteriza como parte de cualquier trato.
Durbin, uno de los principales aliados demócratas en el Senado desde el año 2000, presentó un proyecto de ley junto al republicano Lindsey Graham que les permitiría naturalizarse estadounidenses.
Cristina Jiménez, fundadora y directora de una coalición de “dreamers” llamada United We Dream, dijo que “nunca hemos confiado de los partidos políticos. Tenemos hasta diciembre 22 y vamos a seguir empujando con mucha fuerza”.