Niños migrantes no acompañados: Lo que es cierto y lo que no

menoresFoto en la que dos niñas miran un partido de fútbol en un centro de detención del servicio de inmigración en Nogales, Arizona. Foto AP/Archivo

WASHINGTON, DC.- Desde que el gobierno admitió el mes pasado que le perdió la pista a casi 1.500 inmigrantes menores de edad, arrecia el debate en Twitter en torno a lo que eso significa y a quién es el culpable. Un vistazo a las afirmaciones que hacen ambos bandos y hasta qué punto son ciertas o no:

-LAS FOTOS DEL 2014

“Sin palabras. Nuestra nación no es así”. Declaración del ex alcalde de Los Ángeles Antonio Villaraigosa, hoy candidato a gobernador, aludiendo a un tuit del domingo con fotos de inmigrantes jóvenes encerrados en jaulas de acero.

“Esto sucede en estos momentos, y el único debate que importa es cómo obligar al gobierno a que devuelva estos niños a sus familias lo más rápidamente posible”. Jon Favreau, quien escribiera discursos al presidente Barack Obama, aludiendo a las mismas fotos.

LOS HECHOS: Las fotos son de Associated Press y fueron tomadas en el 2014, durante el gobierno de Obama, pero fueron presentadas por activistas liberales como un supuesto reflejo de los efectos de las políticas del gobierno de Donald Trump hacia la inmigración. Villaraigosa, Favreau y otros eliminaron sus tuits al darse cuenta del error.

Las fotos fueron tomadas por el fotógrafo de AP Ross D. Franklin en un centro de detención de Nogales, Arizona. Una muestra a dos mujeres no identificadas durmiendo en una celda. El pie de grabado habla de los esfuerzos del gobierno por procesar a 47.000 menores no acompañados en el centro de Nogales y en otro de Brownsville, Texas.

Muchos tuits usaron el hashtag “WhereAreOurChildren” (dóndeestánnuestroshijos), surgido del testimonio de un funcionario que en abril dijo que el gobierno le había perdido la pista a casi 1.500 menores no acompañados que ubicó con adultos que aceptaron hacerse cargo de ellos en Estados Unidos.

Trump dijo en un tuit: “Los demócratas erróneamente tuitean fotos del 2014, bajo el gobierno de Obama, que muestran niños de la frontera en jaulas de hierro. Pensaron que eran fotos recientes y que nos harían quedar mal, pero el tiro les salió por la culata”.

Tiene razón en el sentido de que el mensaje era engañoso, pero no está claro que demócratas prominentes hayan tratado de explotar esto.

-LOS “CHICOS PERDIDOS”

“1500 niños inocentes arrancados de los brazos de sus madres en la frontera. Que se pierden en el “sistema” de Trump. “Dadme a vuestros seres pobres y cansados. A esas masas ansiosas de ser libres… y los torturaremos por querer una vida mejor. De la Ciudad Brillante al Imperio del Mal en menos de 500 días”. Tuit del domingo del actor Jim Carrey, que arranca con un fragmento de un poema inscrito al pie de la Estatua de la Libertad.

“¿Qué puede haber más vergonzoso que separar por la fuerza, en Estados Unidos, a los padres de sus hijos en la frontera? Y después perderles la pista a esos niños”. Tuit del viernes de Preet Bharara, un ex procurador del Distrito Sur de Nueva York que fue despedido por Obama.

LOS HECHOS: Los casi 1.500 niños en cuestión llegaron a la frontera sin sus padres y no fueron arrancados de las manos de sus progenitores por las autoridades estadounidenses. Se los mezcla con otros menores que sí vinieron a la frontera con sus padres y fueron separados.

Decir que estos niños están perdidos es engañoso. Sería más acertado decir que el gobierno les perdió la pista, como dijo Bharara.

Un funcionario del Departamento de Salud y Servicios Humanos declaró en una audiencia legislativa el mes pasado que su dependencia había hecho llamadas de seguimiento a las viviendas donde estaban esos menores desde octubre hasta diciembre y había contactado al 86% de los patrocinadores, comprobado que 6.075 seguían con ellos, 28 se habían escapado, cinco se habían ido de Estados Unidos y 52 habían sido reubicados en otros sitios.

El departamento no pudo corroborar la situación de 1.475. En algunos casos, el patrocinador sencillamente no quiso responder a las llamadas, lo que no sorprende dado que muchos de ellos están en el país sin permiso y son renuentes a hablar con las autoridades. El departamento decidió que 792 casos merecían mayor atención y los pasó al Centro Nacional de Llamadas.

No es inusual que se les pierda la pisada a muchos menores que llegaron solos a la frontera.

Durante el último año del gobierno de Obama el departamento pudo ubicar al 85% de los menores o a sus patrocinadores, según un informe del inspector general. El gobierno de Trump mejoró levemente esos resultados en los últimos tres meses del 2017.

-TOLERANCIA CERO

Trump: “Hay que presionar a los demócratas para que pongan fin a la horrible ley que separa a los hijos de sus padres cuando ingresan a Estados Unidos”. Tuit del sábado.

LOS HECHOS: No hay ninguna ley que obligue a separar a los padres de sus hijos en la frontera y los demócratas nunca impulsaron políticas de ese tipo como minoría en el Congreso. Esa es una política del gobierno de Trump, que decidió iniciar procesos penales a las personas que cruzan la frontera ilegalmente por más de que no tengan antecedentes o estos sean menores. El protocolo de Estados Unidos indica que si los padres son apresados, los hijos no permanecerán con ellos.

Al hablar de esta política de tolerancia cero recientemente, el secretario de Justicia Jeff Sessions dijo: “Si cumplimos con nuestro deber y procesamos estos casos, los niños inevitablemente pueden estar en condiciones distintas por un cierto tiempo”.

Un funcionario del servicio de Aduanas y Protección de Fronteras declaró a legisladores la semana pasada que 658 menores habían sido separados de sus padres en la frontera entre el 6 y el 19 de mayo, después de que los agentes comenzasen a dejar los casos de las personas que ingresan ilegalmente al país en manos de procuradores. Esto se suma a los cientos que se cree habían sido separados de sus padres en la frontera desde octubre.

Una ley del 2008, aprobada por unanimidad y refrendada por el presidente George W. Bush dice que los menores que viajan solos y que no vengan de México o Canadá deben ser ubicados en “sitios poco restrictivos”, generalmente con familiares o en refugios manejados por el gobierno, mientras sus casos son tramitados por los tribunales de inmigración, lo que habitualmente toma tiempo.