SAN DIEGO, CA.- Un inmigrante mexicano que viajaba con un grupo de siete indocumentados murió en su intento por cruzar la frontera por las montañas al este de San Diego, California, informó la Patrulla Fronteriza.
El hallazgo del cuerpo se hizo el pasado lunes, luego de que las autoridades mexicanas dieran aviso a la Patrulla Fronteriza estadounidense de la llamada de emergencia hecha por una mujer, quien junto a su esposo se hallaban perdidos en las montañas del área y bajo riesgo de deshidratación.
La dependencia, junto con el equipo aéreo de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), localizaron a unas dos millas al norte de la frontera a la mujer, una mexicana de 22 años, y una hora mas tarde fue ubicado en una zona cercana el cuerpo sin vida del esposo, otro mexicano de 35 años.
La investigación del hecho llevó a las autoridades a detectar a un grupo de seis personas, que habría hecho el viaje junto a la pareja, a unas cinco millas de la frontera y al presunto traficante de las personas.
De acuerdo a las autoridades estadounidenses, se trata de un joven de 23 años que trasladó al grupo desde México y enfrenta cargos criminales, según señaló en un comunicado el jefe asistente interino de la dependencia local de la Patrulla Fronteriza, Boone Smith.
A principios de este año, la dependencia encabezó una campaña informativa para alertar sobre los riesgos que implica cruzar la frontera a través de la zona montañosa de Otay, ruta muy peligrosa utilizada por inmigrantes que son engañados por traficantes.
En el pasado año fiscal, se realizaron 42 operativos de rescate en la zona y fallecieron siete indocumentados, según datos de la agencia federal.