MIAMI, FL.- Los latinos en Estados Unidos celebran a partir de hoy el Mes de la Herencia Hispana, este año marcado por la incertidumbre que despierta la estricta política del presidente Donald Trump contra la inmigración ilegal.
Esta celebración, instituida en 1968 por el presidente demócrata Lyndon B. Johnson, ofrece la oportunidad de “honrar las contribuciones significativas que los latinos han hecho a la historia, cultura y economía de esta nación”, dijo hoy a Efe Arturo Vargas, presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Designados (Naleo).
Este mes, que va del 15 de septiembre al 15 de octubre, resalta los logros y retos que enfrenta esta minoría, especialmente en aspectos como su participación electoral, la inclusión en las esferas de poder empresarial y gubernamental, y la meta de una reforma migratoria.
“Aunque hay mucho que celebrar, sabemos que hay mucho trabajo por hacer para asegurar que nuestra comunidad siga prosperando”, agregó.
Como antesala a una extensa programación a cargo de innumerables organizaciones hispanas a lo largo del país, la Hispanic Heritage Foundation (HHF) destacó este jueves las contribuciones y logros de esta comunidad en la ceremonia de entrega de sus Premios a la Herencia Hispana.
Además del aporte cultural, los ojos de las empresas de bienes de servicio han estado durante los últimos años puestos en la capacidad adquisitiva de la creciente comunidad latina, un mercado que sobrepasa los 1,3 billones (millones de millones) de dólares.
La población hispana del país aumentó un 2 % entre 2015 y 2016 hasta llegar a 57,7 millones de personas, de acuerdo con recientes estimaciones del Censo que muestran un país más diverso en cuanto al origen y raza de sus habitantes.
Ese peso demográfico de la primera minoría del país, que supera a la de los afroamericanos, ha hecho que los especialistas en marketing, los medios de comunicación y los partidos políticos quieran atraérselos sin importar su estatus migratorio.
Sin embargo, según organizaciones latinas, el presidente Trump parece empecinado en ahuyentarlos con sus planes migratorios, que incluyen la construcción de un muro en la frontera con México y las deportaciones masivas de los millones de indocumentados.
Trump tiene además en el limbo a unos 800.000 “soñadores”, como se conoce a los jóvenes indocumentados que se beneficiaron a partir de 2012 de un alivio migratorio otorgado por el entonces presidente Barack Obama que acaba de ser anulado.
Según el centro de investigaciones Pew, la tasa de crecimiento anual de los hispanos se mantuvo estable entre 2016 y 2017, pero siguen suendo el grupo más crece en el país (2 %).
No obstante, esta comunidad vive una gran decepción por la falta de una reforma migratoria que detenga de inmediato las deportaciones y la separación de familias y que abra la puerta para la legalización de por lo menos 11 millones de indocumentados, en su mayoría de origen hispano.
Adicionalmente, según Vargas, esta comunidad enfrenta un nuevo reto para 2020, cuando se realizará el próximo censo decenal oficial de la población.
Naleo teme que los hispanos no sean contados por miedo a participar en el censo, intimidados por posibles represalias migratorias en caso de que agencias federales compartan la información confidencial que es requerida.
“Sólo a través de un recuento completo y preciso podremos garantizar que la comunidad latina tenga igual acceso a la representación política y la asignación de recursos nacionales fundamentales para los próximos diez años”, precisó.
La comunidad hispana se caracteriza además por su juventud, ya que la media de edad es de 28 años, mientras que entre los blancos no hispanos es de 43, según el centro Pew.
También ha presentado un crecimiento electoral que Naleo calculó para la presidenciales de 2016 en más de 27 millones de latinos con derecho a votar, y que seguirá en aumento, especialmente teniendo en cuenta que cada mes 50.000 jóvenes de origen hispano nacidos en Estados Unidos cumplen 18 años.
En ese sentido, líderes de los más importantes grupos latinos, como la Asociación Nacional de Liderazgo Hispano (NHLA), presentaron este jueves una campaña de movilizaciones destinada a organizar a los votantes hispanos con miras a las elecciones legislativas de 2018, con la que buscan decir “basta” al presidente Trump.