Inmigración

EE.UU. recibe nuevos pedidos de asilo de madres y niños de la caravana migrante

Familias migrantes que llegan en caravanas a ciudades de frontera en Estados Unidos, han provocado el colapso por falta de capacidad en sus albergues para recibir a cientos de adultos y niños que llegan a diario en su mayoría procedentes de centroamérica. La Patrulla Fronteriza no da abasto y los envían a otras ciudades, como Denver, Colorado. Foto archivo AP/Hans-Maximo Musielik

SAN DIEGO, CA.- La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de EE.UU. ha recibido ya 14 solicitudes de asilo de integrantes de la caravana de migrantes, cuya mayoría permanece a la intemperie en el cruce entre Tijuana (México) y San Diego (California) a la espera de que su petición sea estudiada.

El primer grupo de ocho personas en ser recibido por autoridades estadounidenses estaba formado en la tarde de este lunes por cuatro niños, tres madres y un joven de 18 años, indicaron hoy activistas que acompañan la caravana.

La elección de los primeros en ser recibidos por las autoridades migratorias estadounidenses se realizó entre los mismos integrantes de la caravana, quienes optaron por enviar primero a los más vulnerables, pues desconocen cuánto tiempo pasará antes de que sean atendidos los casi 200 inmigrantes que acampan junto al cruce.

Este martes se aceptó a un nuevo grupo de seis personas, que incluían madres con sus hijos, por lo que suman 14 personas desde que CBP inició el proceso, informaron activistas.

Esta decisión generó hoy un ambiente de optimismo en el grupo que espera en México después de que el rechazo inicial a recibirlos el domingo creara incertidumbre y tristeza en los integrantes de esta caravana que partió en marzo pasado en Tapachula (Chiapas) con unos 1.500 migrantes, de los cuales solo llegó a la frontera un tercio.

La agencia federal precisó que en función de las “circunstancias” en el puerto de entrada, los inmigrantes deberán “esperar” en México mientras tramitan los casos de aquellos que están ya en las instalaciones de CBP.

El número de personas en ser atendidas dependerá de la complejidad de cada caso, de los recursos disponibles, servicios médicos, disponibilidad de traductores, celdas y el volumen general del puerto de entrada, detalló CBP en un comunicado.

El Gobierno estadounidense ya siguió un protocolo similar cuando, a mediados de 2016, un numeroso grupo de haitianos llegó a la frontera en búsqueda de refugio.

El número de personas en ser atendidas dependerá de la complejidad de cada caso, de los recursos disponibles, servicios médicos, disponibilidad de traductores, celdas y el volumen general del puerto de entrada, detalló CBP en un comunicado. Foto CBP/Archivo

En aquella ocasión, se diseñó un sistema que, en colaboración de las autoridades migratorias mexicanas, permitió que la entrega fuera de un determinado número de inmigrantes cada semana.

“Como en el pasado, cuando tuvimos que limitar el número de personas que podíamos traer para procesar en un momento determinado, esperamos que ésta sea una situación temporal”, señalaron autoridades migratorias estadounidenses.

A su llegada el pasado domingo, la caravana conformada por inmigrantes de Centroamérica que huyen de la violencia que aqueja sus países fue notificada de que la garita de San Ysidro se encontraba al tope de su capacidad dado “un incremento de llegada de personas indocumentadas con solicitud de asilo o presentando casos complejos”, por lo que tendrían que esperar en suelo mexicano.

“CBP continuará trabajando con sus socios de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) para garantizar el manejo continuo de las personas que se presentan sin documentos y el cuidado apropiado de las personas que se encuentran bajo custodia en nuestras instalaciones”, explicó hoy un portavoz de CBP.

Quienes declaren al oficial que tienen miedo a regresar a su país de origen serán llevados ante un oficial de asilo, quien, tras una entrevista, determinará si existe “un temor creíble de persecución o tortura”, indicó.

De ser así, su caso será trasladado a una corte de inmigración y permanecerían en un centro de detención mientras avanza su proceso.

La Patrulla Fronteriza informó de que horas antes de su aviso de saturación de sus instalaciones en San Diego este domingo sorprendieron a un grupo de personas presuntamente “vinculadas con la caravana” intentando cruzar la frontera de forma irregular a unos kilómetros de la garita de San Ysidro.

El Departamento de Justicia informó este lunes de que ha presentado cargos criminales a once de ellos, incluyendo un inmigrante que había sido deportado previamente del país.

La llegada de la caravana a la frontera tiene enojado al presidente Donald Trump, que en repetidas ocasiones ha atacado a las autoridades mexicanas por permitir su paso por el país rumbo a EE.UU.

“La caravana migrante que está desafiando abiertamente nuestra frontera muestra cuán débiles e ineficaces son las leyes migratorias estadounidenses”, dijo este lunes en un mensaje en su cuenta de Twitter.

Una de las estrategias de su Administración ha sido separar a padres de hijos una vez en centros de detención tras pedir el asilo, lo que llevó recientemente a la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) a demandar al Gobierno, que alegó que procede a esta medida si hay dudas sobre el parentesco.

Bardis Vakili, abogado de ACLU en San Diego, dijo hoy a Efe que por este motivo seguirán los casos de las familias de la caravana para asegurar que no se repita.

“Mientras nos preparamos para pedirle a una corte este viernes que se detenga esta política inhumana, también supervisaremos el tratamiento a las familias que llegan a la frontera”, comentó en relación con el litigio.

Exit mobile version