TUCSON, AZ.- El mexicano Ismael Delgado, un inmigrante indocumentado que pasó cerca de dos años en santuario en una iglesia en el norte de Phoenix (Arizona), fue deportado a México después que ser aprehendido por oficiales de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) cuando salió a trabajar.
Representantes de la iglesia Shadow Rock United Church of Christ confirmaron a Efe la deportación de Delgado, quien entró en santuario en octubre de 2015.
“Las circunstancias de la detención de Ismael por oficiales de ICE no son difíciles de entender”, dijo el reverendo Ken Heintzelman, pastor de la iglesia en una misiva enviada a todos sus feligreses.
Indicó que Delgado siempre estuvo preocupado por la situación económica de su familia, y, aunque sabedor del peligro que corría, decidió salir ocasionalmente de la iglesia para hacer pequeños trabajos y ganar un poco de dinero.
El inmigrante, que estaba esperando la decisión de la aplicación de una Visa “U”, fue detenido por ICE el pasado 23 de agosto, después que limpiar el jardín de una casa y solo cinco horas después fue deportado a Nogales, Sonora (México).
“Cuando el auto de Ismael fue detenido por ICE, los agentes le dijeron que sabían muy bien quién era, que sabían quién era su esposa, sus hijos y donde estaba su casa. La intimidación fue intencional”, dijo Heintzelman en la misma misiva.
Delgado, quien tiene una esposa y dos hijos estadounidenses, buscó santuario después de haber recibido una orden de deportación tras un largo proceso después de haber sido detenido dos veces por manejar bajo la influencia del alcohol (DUI).
Tras pagar su condena en la polémica cárcel al aire libre denominada “Ciudad las Carpas”, del entonces alguacil del condado de Maricopa, Joe Arpaio, se inició un proceso de deportación en su contra.
Delgado se convirtió en la “imagen” del movimiento santuario cuando relató su historia al programa “60 Minutes”, de la cadena CBS, el pasado mes de mayo.
Tras este suceso, el pasado domingo la iglesia de Shadow Rock dio la bienvenida a otro inmigrante mexicano, que también solicitó santuario, José Mora Navarrete, de 25 años de edad y que llegó a EE.UU cuando era apenas un niño.