WASHINGTON.- Las detenciones de inmigrantes en la frontera entre México y Estados Unidos cayeron en octubre y noviembre un 43 % con respecto al mismo periodo del año anterior al registrarse en total 73.861 arrestos, informó hoy el Departamento de Seguridad Nacional.
La bajada se sitúa en línea con los datos de meses anteriores y que hicieron que, en el año fiscal 2017 (entre el 1 de octubre de 2016 y el 30 de septiembre de 2017), las detenciones en la frontera con México cayeran a su nivel más bajo en 46 años al registrarse 310.531 arrestos.
Los datos de hoy, los primeros relativos al nuevo año fiscal, muestran que la mayoría de los detenidos eran adultos, aunque hubo un incremento del 26 % con respecto al mes anterior en el número de niños arrestados que viajaban solos, así como un aumento del 45% en los individuos detenidos que viajaban en familia.
Desde la llegada de Donald Trump al poder en enero, las cifras de llegadas han descendido significativamente, aunque en mayo comenzaron a registrarse incrementos mensuales del número de detenciones en la frontera con México, especialmente familias o niños que viajan solos.
Esa tendencia de aumento en la llegada de familias y niños se ha repetido en los meses de octubre y noviembre.
Específicamente, fueron detenidos 7.168 niños: 3.168, en octubre; y 4.000, en noviembre, según detalló en su web la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), encargada de las detenciones en la frontera.
Por nacionalidades, la mayor parte de niños detenidos (3.333) proceden de Guatemala, seguidos por los originarios de México (1.756), Honduras (1.154) y El Salvador (660).
Mientras tanto, el número de individuos que viajaban en familia y fueron detenidos fue en total de 11.857, aunque hubo un significativo incremento de ese tipo de arrestos en noviembre (7.018), mientras que en octubre fue de 4.839.
La mayor parte de los integrantes de unidades familiares detenidos proceden de Guatemala (5.861), seguidos de Honduras (3.497), El Salvador (2.067) y México (314).
De esa forma, según muestran los datos, buena parte de los menores y familias que tratan de entrar a EEUU siguen viniendo del Triángulo Norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador).
En el 2014, Estados Unidos vivió una crisis migratoria sin precedentes en la frontera suroeste debido a la llegada de miles de niños que viajaban solos y, en su mayoría, huían de la violencia y la falta de oportunidades económicas de los países del Triángulo Norte de Centroamérica.
Por otro lado, en su web, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza detalla que 34.855 inmigrantes fueron detenidos en octubre, lo que supone una bajada de casi el 48 % con respecto al mismo mes del año anterior, cuando 66.708 inmigrantes fueron arrestados en la frontera entre México y EEUU.
Con respecto a noviembre, 39.006 inmigrantes fueron detenidos este año, lo que supone una bajada del 38 % con respecto al mismo mes del año anterior, cuando hubo 63.361 arrestos.
Varios expertos atribuyen el descenso en las detenciones al llamado “fenómeno Trump”, pues creen que la retórica del mandatario ha intimidado a los inmigrantes y les ha obligado a permanecer en casa.
No obstante, bajo el Gobierno de Trump, ha habido un significativo incremento en el número de arrestos de inmigrantes por residir ilegalmente en el país o por haber cometido algún delito, según muestran los datos del año fiscal 2017 del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Solo entre enero, cuando Trump tomó posesión, y septiembre, cuando acaba el ejercicio, los agentes del ICE detuvieron a 110.568 inmigrantes, lo que supone un incremento del 40 % con respecto a todo el año fiscal anterior cuando, bajo el Gobierno de Barack Obama, hubo 77.806 detenciones.